Érase una vez un cantautor al que le gustaba Sabina, y grabó una maqueta y dio millones de vueltas por discográficas, como tantos otros, sin ningún resultado apreciable.
Paralelamente para los amigos, hacía versiones más ácidas y, directamente, pornográficas, tanto que le convencieron para dar conciertos y empezar a hacer discos en plan casero. El hecho de ir un paso más allá en ser Radikal, le hizo ser muy pirateado y hacer grandes giras por locales pequeños.
El único problema es que al no ser políticamente correcto, está vetado en las radiofórmulas por lo que ya ha tocado su techo, y no pasará de ser "Serie B".
No sabemos todavía si habrá o no concierto el sábado, a pesar de ser letras groseras y obscenas, la puesta en escena es de cantautor de toda la vida, él, su guitarra y su voz.
En el último disco, del que podéis ver la portada, hizo dos temas sin ser tan gore como le son habitual, cosa que fue muy criticada por sus fans.
En la actualidad está grabando un disco que publicará bajo el nombre de José Córdoba, quitándose el estigma de Pornoautor, y, sabe dios, si siendo políticamente correcto, traspasará las barreras del mercado y llegará a más.
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2 comentarios:
La cruda verdad o los garbanzos cocidos? esa es la cuestion.
Está claro, los garbanzos, que para Jamón no da!.
Al final no hubo concierto, era una errata :(
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